Y es que, si bien es cierto que la UNAM expidió el título, el Registro de Profesiones, que desde luego depende de la SEP, es el encargado de dar el visto bueno. De modo que por donde le busquen la responsabilidad es compartida.
Lo cierto es que este caso ha adquirido magnitudes que ha puesto en serios aprietos al propio ejecutivo federal, prueba de ello es que el caso de la ministra Yazmin Esquivel, es un tema recurrente en sus conferencias mañaneras. De modo que los cercanos al presidente ya no saben como finiquitar el desgastante y vergonzoso caso.
