La ley de causa y efecto se basa en la idea de que toda acción provoca una reacción, una consecuencia o un resultado, de modo que después de que la mayoría morenista en el Congreso Federal aprobaron el dichoso Plan B, las consecuencias no se hicieron esperar. Resulta que debido al recorte presupuestal, delegados estatales y distritales del INE manifestaron ayer su preocupación por el despido de cerca de 4 mil empleados, también derivado de la eventual aplicación de la reforma electoral.
Por tal motivo, en la primera de cinco reuniones con vocales ejecutivos estatales y distritales, ayer el INE convocó a personal de la cuarta circunscripción, que incluye Guerrero, Tlaxcala, Morelos, Puebla, Durango y la Ciudad de México, estados que incluyen 58 distritos.
En esa junta se contó con ocho consejeros del INE, quienes les afirmaron que no los dejarán solos y el Consejo General presentará los recursos legales para echar abajo la reforma. De modo que como dice el gran campeón mexicano, Julio César Chávez, «!hay tiro, hay tiro!»
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