Una de las situaciones que las autoridades habían señalado como graves, luego de la captura de Ovidio Guzmán López, el pasado 5 de enero, fue que habían encontrado explosivos en la zona donde fue detenido. Sin embargo, conforme pasan los días han señalado que elementos de la Guardia Nacional han implementado operativos para desactivar dichas granadas. El día 17 de enero informaron la desactivación de más de diez explosivos en la comunidad de Jesús María y otras comisarías.
En un comunicado el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha, informó: «Se han hallado 10 granadas tiradas en el lugar, unas en el jardín, otras en la calle; cualquier artefacto que alguien pise estalla, entonces son bombas que están ahí; ese personal anda inspeccionando qué no exista ese tipo de peligros», indicó.
Señaló que, a 12 días de haber ocurrido la detención del hijo del exlíder del Cártel de Sinaloa, Joaquín Guzmán Loera, las cosas se van normalizando. Cabe señalar que luego del 5 de enero Culiacán, Sinaloa, era un caos, pues grupos de sujetos armados pertenecientes al Cártel de Sinaloa generaron pánico entre los pobladores.
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