Señala la máxima bíblica: «De la abundancia del corazón habla la boca». Esto quiere decir que a veces el inconsciente nos juega una mala pasada y suelta las intenciones o pensamientos oscuros que tenemos en el alma. Esto fue lo que le pasó a Anton Krasovsky, un presentador de la televisión rusa quien, al entrevistar a un militar sobre la invasión a Ucrania, se atrevió a comentar sobre los niños ucranianos: «Estos niños necesitan ser ahogados directamente […] Tan pronto digan que ‘los rusos han invadido Ucrania’, los arrojan a un río con una corriente violenta».
Pero no sólo eso, también comentó que los niños deberían ser quemados junto con sus viviendas. Anton Krasovsky ya suspendió a este presentador, quien ahora dice que está terriblemente avergonzado por lo que dijo: «A veces sucede así: estás al aire y te dejas llevar. Y no puedes parar».
El ministro de relaciones exteriores ha pedido a las naciones que suspendan las transmisiones del canal RT de su señal: «Los gobiernos que aún no han prohibido RT deben ver este extracto. Este es su lado si permiten que RT opere en sus países. Incitación agresiva al genocidio (llevaremos a juicio a esta persona por ello), que no tiene nada que ver con la libertad de expresión. ¡Prohibición de RT en todo el mundo!».
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