Sin embargo, a las redacciones de diferentes medios sigue llegando información, acompañada de videos, en donde se ve cómo grupos armados asaltan camiones y vehículos particulares. Bien dicen los transportistas, “este gobierno lo niega todo”. ¿Y por qué negarlo? Pues para no hacerse responsables de la seguridad en esa zona. Desde que el crimen organizado opera en el estado de Veracruz, las carreteras de Veracruz que conducen a Puebla por la zona de Orizaba han sido de constantes asaltos, pues la presencia de este tipo de grupos no ha podido ser erradicada.
Reconocer que los asaltos ocurren es como reconocer su fracaso. Claro, los mal pensados podrían decir que el gobierno de Cuitláhuac García podría estar coludido con el los cárteles que ahí operan; y que la Guardia Civil y la Secretaría de Seguridad Pública les dan protección. Pero eso sólo lo cree la Secretaría de la Defensa Nacional.