Aunque las autoridades informaron sobre la detención de El Apá y el RR, dos líderes del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), la verdad es que no se detuvo a estos líderes, sólo se detuvo a personas que participaron en los bloqueos, quemas de autos y tiendas de conveniencia. Al parecer sigue sin funcionar la estrategia de seguridad del presidente.
Al parecer los delincuentes no entienden que, si el gobierno les está ofreciendo abrazos, ellos no deben contestar con balazos. Esto recuerda la fábula de la rana y el escorpión. El presidente “rana” los dejó ser, dejó que los delincuentes se subieran en su lomo, y ellos, por su naturaleza, responden picando el lomo de la rana.