En esta vida nadie pude tapar el Sol con un dedo, quien lo intente, no podrá lograrlo. Resulta que el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, a pesar de que diga que no está trabajando para Rocío Nahle y niegue que la iniciativa entregada al Congreso del Estado para reformar la constitución local y permitir que cualquier ciudadano pueda ser gobernador de Veracruz, sin haber nacido en el estado, sea una “ley a modo” para favorecer a algún aspirante a la gubernatura de Veracruz.
Es un hecho que su cancerbero que tiene en la Junta de Coordinación Política, Juan Javier Gómez Cazarín, ya tiene la encomienda para tamalear la “Ley Nahle” que allane el paso para la nacida en Jerez, Zacatecas.
«No pierdan de vista que la Suprema Corte de justicia ya dejó jurisprudencia al respecto: no necesitas ser nacido en un estado para acceder a los cargos públicos más altos en ese estado; cargos públicos por elección de ese estado. Y, ya tenemos gobernadores que no nacieron en su estado que están gobernando o gobernaron debido a esa resolución. Yo pienso que todos los congresos de los estados ya tienen que sintonizarse de acuerdo a esa resolución de la Suprema Corte», dijo el Ejecutivo estatal. De modo que si no sucede otra cosa, la llegada de la encargada de la energía en el país como candidata para gobernar a los veracruzanos, puede ser una penosa realidad.
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