7 años de Libertad bajo Palabra; no ha sido fácil, pero ha sido satisfactorio. En un estado donde no se respeta la libertad de expresión, navegamos contra corriente

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Libertad bajo Palabra FOTO: WEB
- en Carrusel, Opinión

Armando Ortiz / “Nadie rebaje a lágrima o reproche”, así da inicio el “Poema de los dones” de Jorge Luis Borges, quien quiso con ello anticiparse a aquellos que pensaban que un poema sobre la ceguera, sobre su ceguera, podía ser la quejumbre de un hombre amargado. Asimismo, ni es lágrima ni es reproche cuando decimos que no han sido fáciles estos siete años de Libertad bajo Palabra. No han sido fáciles porque en Veracruz no se respeta la libertad de expresión. Cierto, el gobierno dice que sí, que uno como medio informativo puede publicar lo que sea sin que haya represalias. Pero miente, represalias las hay, pero los actores del gobierno de Veracruz tiran la piedra y esconden la mano. Un ejemplo muy simple: Trate de anotar la dirección web de Libertad bajo Palabra en la red social de Facebook, verá que no puede; tate de compartir en Facebook alguna nota de Libertad bajo Palabra, vera que no puede. Eso es obra de los esbirros del gobierno de Veracruz. Pero ni lagrimeamos ni le reprochamos nada. Esta adversidad nos ha hecho más fuertes en otras redes sociales, incluso en los buscadores de Google; los pedidos de las agencias de publicidad, incluso del extranjero, no han disminuido. Nuestro afán de informar no ha disminuido, nuestra temeridad y entereza siguen firmes. Seguimos informando, seguimos denunciando, seguimos acusando con pruebas la corrupción y las mentiras de un gobierno que prometió cambios, pero que sólo ha generado decepción, burla y dolor. Seguimos esgrimiendo la palabra como una espada, y aunque nos han ofrecido la comodidad de los abyectos a cambio de la servidumbre de los lacayos, nos hemos negado porque nuestro compromiso es con nuestros lectores, no con el gobierno. Siete años de Libertad bajo Palabra, les advertimos, es apenas el inicio y no vamos a claudicar. Gracias a nuestros lectores, a nuestros colaboradores, al personal que se la ha rifado con nosotros. Gracias a Dios por permitirnos ejercer el oficio del periodismo con dignidad, algo que nos deja satisfechos.

El AIFA obliga a Aeroméxico a cancelar sus vuelos a Villahermosa y a Cancún; salían vuelos con 4 pasajeros, eso no es negocio

Por quedar bien con el presidente López Obrador algunas aerolíneas iniciaron vuelos desde el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles; otras se vieron obligadas por las súplicas del propio presidente a mudar vuelos al AIFA. Sin embrago, que no se nos olvide que una aerolínea es un negocio, un negocio de debe dejar dinero, en todo caso no sería negocio. Realizar vuelos a Villahermosa o a Cancún con sólo cuatro pasajeros significa una gran pérdida para las aerolíneas. Es por ello que, por mucho que quieran quedar bien con el presidente López Obrador, los directivos de Aeroméxico decidieron cancelar sus vuelos a Villahermosa y a Cancún. Un avión de Aeroméxico tiene hasta 274 asientos disponibles, sin embargo, el promedio de pasajeros en los vuelos desde el AIFA, es de 23; hay vuelos, como señalamos, en los que sólo han viajado 4 pasajeros. Otros vuelos que la aerolínea tenía planeados se han echado para atrás. Es lo mismo que han estado haciendo otras aerolíneas, las cuales tenían pensado mudar algunos vuelos del Aeropuerto Internacional Benito Juárez al AIFA. Esto quiere decir que, si ya de por sí el AIFA era un pueblo fantasma, más despoblado va a estar con estos vuelos cancelados. Ahí está una de las obras insignia del gobierno de López Obrador; un aeropuerto convertido en un verdadero “elefante blanco”.

En la Ciudad de México festejan decomisó de más de una y media tonelada de cocaína; a ese nivel dejaron crecer el tráfico y el consumo

Con el decomiso de 1.6 toneladas de cocaína que transportaban en un tráiler rumbo a Tepito en la CDMX, hay varios detalles que las autoridades quieren pasar por alto. En primer lugar, ese tráiler no es el único ni será el último que transporte esa cantidad de droga hacia la Ciudad de México; en segundo lugar, antes de ese tráiler seguramente hubo otros y habrá otros. Es decir, los 1.6 toneladas de cocaína son una muestra del tráfico y consumo cotidiano que hay en la capital del país. Es decir, la Ciudad de México, además de extorsión, está inundada de droga. El gobierno de Claudia Sheinbaum vende este decomiso como un gran logro de seguridad. 400 millones de pesos en droga proveniente de Colombia con destino a Tepito y para la costa oeste de Estados Unidos en Los Ángeles, California, donde, dicen, se duplicaría su precio. Con esto las autoridades también reconocen que la ruta del narcotráfico hacia los Estados Unidos atraviesa la Ciudad de México. Se responsabiliza al Cártel de Sinaloa por el traslado de toda esta droga; cuatro personas de este cártel fueron detenidas junto con el tractocamión que lo transportaba. Al final de su conferencia de prensa Omar García Harfuch tuvo que reconocer: “Esto que hay que analizar es la mecánica del consumo de las drogas, la dinámica del consumo; lamentablemente en la Ciudad de México va en aumento el mercado de la cocaína como va en aumento en EU”.

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