«Sí, desde luego, empezando porque ya no hay dedazo. Fíjense, el cambio tan importante, que el presidente no tiene un candidato o una candidata predilecta, o predilecto, quién va a decidir del pueblo y no hay que tenerle miedo al pueblo y no estar pensando, y eso es una recomendación, un consejo, de que van a funcionar las estrategias de siempre. No se puede poner vino nuevo en botellas viejas, ya esto cambio, ya no es el peinado, cómo te vas a engominar o cuánto moco de gorila te vas a poner, y cómo vas a comportarte. Se acuerdan cómo era antes que los ponían a reírse», contestó.
Sin embargo, y eso téngalo por seguro de que esa respuesta muy pocos la creyeron, ya que es muy marcado las deferencias que muchos gobernadores e incluido el propio presidente han tenido con la jefa de Gobierno de la Ciudad de México. No por algo, el Carnal Marcelo ya levantó la voz como su correligionario amigo de Zacatecas, Ricardo Monreal.