Pues apenas la semana pasada se daba a conocer que las empresas particulares, que gestionaron un amparo, no estaban obligas a comprar a Pemex ni a CFE. Hoy, el gobierno del presidente López Obrador recibe otro golpe más. Un juez otorgó el miércoles una suspensión definitiva sobre el pago mientras dura el juicio de amparo, según recoge el expediente público y relatan a este medio fuentes conocedoras del caso.
La multinacional española reclamaba la suspensión como medida cautelar, pero la Comisión Reguladora de Energía (CRE) aún puede impugnar la decisión ante un tribunal superior. Al parecer esta guerra de pulseadas entre el gobierno mexicano y las empresas privadas aún va para largo. Por lo pronto, las empresas privadas ya llevan dos rounds ganados.