¿Se está rompiendo el pacto de impunidad que existe entre Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador? ¡Por supuesto que no! Muchos analistas indican que lo único que está haciendo el gobierno de López Obrador es darle un “estate quieto” a Peña Nieto, o quizá sólo le está mandando un mensaje de advertencia para que siga alejado de los asuntos políticos del país que gobernó de 2012 a 2018. Vale señalar que el dirigente del PRI, Alejandro Moreno, hizo una visita relámpago a Europa.
Los medios informaron que fue a Ginebra, que para poner una demanda a la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos. Sin embargo, otros dicen que ante la guerra despiadada que se ha desatado en contra de él, Alito fue a pedirle ayuda al expresidente Peña Nieto. El caso es que coincide el viaje de Alejandro Moreno a Europa con el ajuste de cuentas que la Unidad de Inteligencia Financiera está haciendo contra Peña Nieto.
¡Qué casualidad que apenas se están dando cuenta de las empresas vinculadas al expresidente y su familia, la cual recibió miles de millones de pesos del presupuesto federal! Ojalá el agua llegase al río, así, presionado Peña Nieto no tendría de otra que sacar los videos que dicen tiene en su poder, donde pone en evidencia más corrupción de la familia del presidente López Obrador.
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