Ya estaba muy engallado el presidente López Obrador para enfrentarse a los ambientalistas que apoyan el movimiento #SelvameDelTren. Los había citado para este lunes 25 de abril a Palacio Nacional para mostrarles los estudios de impacto ambiental que su gobierno había realizado antes de diseñar el trazo del Tren Maya. Sin embargo, de un momento a otro el presidente canceló. La excusa fue que algunos de esos que él llama “pseudoambientalistas” se negó a reunirse con él. La verdad es que sólo Eugenio Derbez denegó la invitación.
El periodista Salvador García Soto nos dice las verdaderas razones de la cancelación de esa reunión: «No existen los estudios de impacto ambiental que soporten y apoyen la decisión de talar la selva y poner en riesgo al milenario sistema de acuíferos subterráneos de la península de Yucatán». Señala el columnista de El Universal: «Una fuente directa de la Semarnat confirmó a esta columna que no se ha levantado un estudio del impacto que tendrá en el ecosistema y en el medio ambiente de los más de 100 kilómetros de superficie selvática que está siendo talada para instalar las vías que conducirán el tren prioritario para este gobierno».
Pues así con el presidente, que de un momento a otro le sacó a ir con los ambientalistas quienes tienen razón en su reclamo de que están devastando la selva con la construcción del famoso Tren Maya.
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