Muy asertivo el presidente López Obrador en sus mañaneras, afirmando que su Reforma Eléctrica pasará sin quitarle un puno ni una coma. Sin embargo, ahora ya sale con sus galimatías, señalando que la reunión con John Kerry, enviado especial del gobierno de los Estados Unidos para temas de Energía, fue una reunión amable, cordial. «Considero que fue un encuentro amistoso, necesario y benéfico», dijo el presidente de México. Sin embargo, el periódico Reforma en su primera plana de este viernes anota: «John Kerry dijo que, tras cuestionamientos en reunión, AMLO ofreció cambios en plan de reforma eléctrica, como promover energías limpias».
López Obrador, como presidente de una república bananera, dobló las manos otra vez ante la presión de los Estados Unidos. Más diplomático John Kerry declaró ante los medios: «El tema de la reforma energética está sobre la mesa en México y planteamos con nuestro embajador, Ken Salazar, ideas de cómo esa reforma reflejará mejor los temas para avanzar de manera efectiva (…) formamos nuestro equipo, con Ken y la Casa Blanca para tratar de asegurar todo lo que surja de la reforma energética».
Ya veremos en los siguientes días qué ocurre. Seguramente López Obrador dirá que conforme a su albedrio él autorizará cambios a su Reforma Energética, pero los mexicanos inteligentes sabrán que AMLO sólo acata las disposiciones del gobierno americano.
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