¿Qué falló en el gobierno de López Obrador? ¿Por qué un proyecto que llegaba con las mejores intenciones terminó convirtiéndose en un régimen tan corrupto? La respuesta que le da López Obrador a Julio Scherer cuando este le muestra la trama macabra en su contra nos muestran que el presidente se volvió desidioso y falto de juicio. Le muestra Scherer las pruebas de que se urde una embestida en su contra y López Obrador dice: “Son chismes”. Pues esos chismes crecieron, tanto que tres de los funcionarios de más alto nivel en el gobierno de López Obrador han quedado en entredicho. Julio Scherer desde Proceso, la revista que fundara su padre, expone un complot en su contra urdido por Alejandro Gertz Manero, fiscal de la nación y Gloria Sánchez Cordero, exsecretaria de Gobernación.
En un documento enviado a Proceso, Scherer Ibarra expone la manera como él influyó para que Gertz Manero llegara a la Fiscalía General de la República, por encima incluso de Bernardo Bátiz, quien fuera procurador del DF con López Obrador. En ese mismo documento Scherer desglosa cada uno de los casos en los que la Sánchez Cordero y Gertz Manero intentaron involucrarlo en casos como el pleito legal con el Cruz Azul, el caso de la pareja Gómez Mont y Álvarez Puga o en el de Juan Collado, quien, a decir de Julio Scherer, se prestó para acusarlo de extorsión.
Es un documento extenso que aparece en el más reciente número de la revista Proceso, un documento que merece la pena revisar pues ahí se muestran las tripas de un gobierno en plena descomposición.
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