Juan David Castilla / Xalapa, Ver. Telefonistas jubilados y en activo protestaron frente a Palacio de Gobierno para denunciar que continúan las violaciones al contrato colectivo de trabajo.
Se trata de integrantes de la sección 17 del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), quienes han brindado decenas de años de servicio a la empresa Teléfonos de México (Telmex) y exigieron que sean respetados sus derechos laborales.
De acuerdo con Héctor Amaro Salazar, uno de los jubilados, Telmex cedió a Telcel, otra empresa de Carlos Slim, todo el espectro para la banda ancha de telefonía móvil, donde se activaría la red 5G en las 18 principales ciudades del país; sin embargo, la organización sindical no fue tomada en cuenta en esta “revolución en las comunicaciones”.
El entrevistado detalló que para lo anterior se crearon empresas filiales y contrataron a personal externo para todas las especialidades de Telmex, afectando a la plantilla de sindicalizados, donde hace más de dos años no ha ingresado personal nuevo.
También comentó que la transición en las comunicaciones ha significado la fuga de casi toda la materia de trabajo, llevándose los sectores más rentables de Telmex y dejando sin reparto de utilidades a los empleados en activo por tercer año a consecutivo al no haber inversión en la empresa.
Añadió que actualmente los edificios, los muebles de oficina, los vehículos y el equipo de las centrales dejaron de pertenecer a Telmex, pasando a otras empresas también propiedad del multimillonario Carlos Slim.
Amaro Salazar señaló que también pretenden modificar las cláusulas de jubilación en el contrato colectivo de trabajo e incumplir los acuerdos y compromisos al respecto.
A su juicio, la dirigencia nacional del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana ha emplazado a huelga durante tres años, sin resolverse ningún aspecto de la agenda laboral.
«Es indiscutible que enfrentamos un nuevo contexto y cada vez son más claras y definidas las acciones de los dueños del consorcio América Móvil para acabar con nuestro contrato colectivo de trabajo y nuestros derechos laborales», culminó.
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