Daniel Chávez, dueño del consorcio hotelero Vidanta, se sintió obligado a hacer algunas precisiones con respecto a lo que en los últimos días se ha publicado sobre su empresa y sobre su persona. Reconoce Daniel Chávez que es Supervisor Honorífico del Avance del Tren Maya. «Mi función como Supervisor Honorario de Avance de el Tren Maya -dice Daniel Chávez- no tiene relación de ningún tipo con temas de proyecto, trazo o administración. Mi labor consiste únicamente en tener una revisión y medición fidedigna de los avances de obra».
Entre otras cosas, precisó que las concesiones de terrenos que le han sido otorgadas, y que algunos medios señalaron fueron otorgadas por el gobierno de López Obrador, le fueron otorgadas en otros sexenios; en el presente sexenio sólo se renovaron esas concesiones. En ese tono Daniel Chávez anota y precisa varios puntos en los que ha sido señalado. Llama la atención que Daniel Chávez no mete la mano por sus hijos mayores de edad, propietarios de Kei Partners, la supuesta empresa que contrató como asesor legal al hijo de López Obrador.
Tampoco acusó que se había armado una guerra mediática en contra de sus hijos, quienes por cierto no tuvieron el cuidado de que su invento de empresa se librara de plagios e incongruencias, dado que la página web de esta empresa se creó a la par de la excusa que diera conocer José Ramón López Beltrán. Por otro lado, el presidente López Obrador ha ocupado varias conferencias mañaneras para defender a sus hijos y hasta para llorar por ellos.
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