Han Horká, quien no se quiso vacunar como si lo hicieron su hijo y su esposa, estuvo enferma. El hijo de la cantante comentó: «Mi papá y yo fuimos vacunados, pero nos contagiamos en Navidad. Estuvimos enfermos durante tres días, seguidos de estados post-enfermedad como pérdida del olfato y cosas por el estilo. Mamá estuvo enferma durante cinco días. Ella se enfermó después de Navidad. Normalmente iba en contra de la existencia de la enfermedad y de las vacunas».
El último día de Han Horká ella salió a caminar un poco, regresó con un dolor de espalda, le dieron un masaje, se acostó y en sólo 10 minutos se asfixió y murió. El hijo de Hana Horká declaró en entrevista: «Ella prefirió tener la enfermedad que ser vacunada. Es un ejemplo ilustrativo para los círculos en torno a Jaroslav Dušek, Lukáš Pollert, Sona Peková (opositores y anti vacunas)».