En este momento que muchas tareas de construcción y seguridad se están dejando en manos del Ejército, es importante dejar en claro que los elementos del Ejército también son corrompibles. Ahí está el caso del general Eduardo León Trauwitz, quien después de ser escolta de Enrique Peña Nieto, pasó a ser el encargado de la subdirección de Salvaguardia Estratégica de Petróleos Mexicanos; es decir, este general debía cuidar que no se robaran el combustible de la paraestatal. ¿Y que hizo? Pues todo lo contrario. Se coludió con los grupos de huachicoleros para brindarles protección.
De acuerdo con documentos de la propia FGR a Eduardo León Trauwitz se le acusa de que, “como titular de la subdirección de Salvaguardia Estratégica (SSE) de Petróleos Mexicanos (Pemex), ordenaban a los ‘agentes de seguridad física’ de la institución ‘sembrar tomas clandestinas de hidrocarburos’, no dar parte al Ministerio Público de la localización de ilícitos y no reportar por escrito sus actividades de manejo técnico, o perderían el empleo”.
Así cómo lo oye. Este tipo era el que operaba todo lo que tenía que ver con el huachicoleo en el país. Y era un miembro de alto rango del Ejército. Afortunadamente ya lo detuvieron en Canadá, sólo falta que lo extraditen a México y lo juzguen.
Comentarios