La situación preocupa mucho a las personas pues los animales se encuentran sueltos en la residencia y debido a la apariencia física del león, los vecinos temen salte las rejas de la casa. De igual forma los habitantes mostraron su preocupación por el perro que, aparentemente convive en tranquilidad con el león. De acuerdo a las declaraciones, sólo una persona acude para alimentar a los animes y posteriormente se retira.
Los habitantes del lugar ya han pedido ayuda a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y de la Procuraduría de Protección al Ambiente del Estado de México (Propaem). Hasta el momento las autoridades no han intervenido. Los vecinos desconocen cómo fue que llegó a hasta esa casa el león africano y el perro, pues informan que se percataron de su presencia al escuchar los rugidos del animal