Filiberto Vargas Rodríguez /
Prefacio.
Por más que han querido echar tierra al asunto, lo cierto es que el caso del perredista Rogelio Franco Castán sigue siendo tema, incluso a nivel nacional. *** En su edición de este domingo, el periódico El Universal publicó un trascendido. *** “En busca del fuero. Vaya maniobra que intentará hacer el PRD en la Cámara de Diputados. Nos cuentan que están pensando solicitarle a la Mesa de Decanos que el próximo 28 de agosto les permita tomarle protesta como legislador federal a Rogelio Franco, detenido en Veracruz y que señalan como ‘preso político’ por oponerse al gobierno de Cuitláhuac García. Nos adelantan que quieren que muchos legisladores federales ese día rindan protesta a distancia para evitar contagios y, claramente, Franco podría hacer lo mismo e incorporarse a la bancada del Sol Azteca a partir del 1 de septiembre”. *** Haciendo uso de las peores chicanadas, con el evidente propósito de ganar tiempo y evitar que asuma el cargo de diputado federal, el gobierno de Cuitláhuac García ha retenido en la cárcel, de manera ilegal, a aquel que fuera dirigente estatal del PRD y secretario de Gobierno durante el mini-gobierno de Miguel Ángel Yunes. *** El gobierno de Veracruz camina sobre tierras movedizas, confiado en que siempre tendrá la ayuda de quien gobierna el país. *** Cuitláhuac García no debe perder de vista que ese respaldo lo tendrá mientras le sea útil a su jefe político. Cuando lo consideren un peón sacrificable, habrá acabado su buena suerte.
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Contrario a lo que pregona el Presidente y sus corifeos, en la actualidad se fortalece aquella premisa: “Todo tiempo pasado fue mejor”.
Allá por septiembre del 2010, el entonces gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, hacía un balance de los daños ocasionados por el huracán “Karl” en su paso por territorio veracruzano y anunciaba que acudiría en busca del apoyo de la Secretaría de Hacienda “para poder hacer frente a las afectaciones del huracán, estimadas en 50 mil millones de pesos”.
Hoy nuestro optimista secretario de Finanzas, José Luis Lima Franco (su humilde morada, por supuesto, no sufrió daño alguno) presume que para hacer frente a los daños causados por el huracán “Grace”, el gobierno estatal cuenta ya con 114 millones de pesos de un Fideicomiso Estatal de Desastres que debió ser creado cuando López Obrador ordenó desaparecer (y embolsarse lo ahí acumulado) el Fondo Nacional de Desastres (Fonden), además de que cuenta la administración estatal con un Seguro contra Desastres, y está a la espera de que la Secretaría de Hacienda les destine fondos “de un apartado para el tema de desastres en los Estados”.
Cifras, las de hoy, muy lejanas a lo que se disponía en otros tiempos para asistir a las comunidades más afectadas por fenómenos naturales.
Pero, ¿qué pasó con el Fonden?
Resulta que al Presidente le hacía falta dinero para comprar votos (vía sus “programas sociales”) y decidió cancelar todos los fideicomisos, incluido el Fondo para Desastres Naturales.
Así lo justificó en diciembre de 2020:
“Decían que si desaparecía el Fonden ya no iba a haber apoyo para los damnificados. Estamos apoyando en Tabasco, estamos apoyando en Chiapas, estamos apoyando en Veracruz, en el sureste. Ya no está en Fonden. ¿Quién apoya? Directamente las dependencias, y muchísimo más que lo que hacía el Fonden. Y al terminarse lo del Fonden se acaba la corrupción que había en el Fonden”.
Y hace apenas 10 días se refirió también a ese fondo:
“No existe el Fonden porque era un instrumento plagado de corrupción, era una práctica declarar emergencias, zonas de desastre y autorizar compras masivas o hacer obras sin licitación, o transferir dinero del gobierno federal a los estados para que hicieran lo propio. Si había una sequía, si había una inundación, entonces se usaba el Fonden y no llegaba el dinero a la gente”.
No existe una sola denuncia penal contra alguien por haber hecho mal uso de los recursos del Fonden, no existe un solo señalamiento (ni siquiera mediático) por un presunto desvío de los recursos de ese fideicomiso: El Fonden era corrupto porque así lo dice López Obrador, lo mismo que las estancias infantiles, o que el Seguro Popular, o los órganos electorales, o todos aquellos programas que no son ocurrencia del actual Presidente.
Hoy ese empecinamiento por descalificar todo lo que no ha instaurado a él, de desdeñar cualquier iniciativa ajena a su proyecto, está costando vidas.
Este, el primer fenómeno natural de gran envergadura que enfrenta la administración de Cuitláhuac García, no tuvo saldo blanco. En su contacto con territorio veracruzano cobró la vida de al menos ocho personas, seis de ellas menores de edad. Faltan las secuelas, el desbordamiento de ríos que llegarán cargados del agua que el huracán arrojó en las montañas.
Alguien tiene que explicarle a la titular de Protección Civil, Guadalupe Osorno, que su tarea es prevenir, preparar a su equipo y a los veracruzanos para enfrentar de la mejor manera estas contingencias, y no limitarse a hacer el recuento de los daños.
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Epílogo.
Este fin de semana la Iglesia Católica manifestó su preocupación por el riesgo que correrán niños y jóvenes con la determinación del gobierno federal de reanudar las clases presenciales a partir del lunes 30 de agosto. *** “Esta determinación oficial sucede en este tiempo, en el que la tercera ola del Covid-19 ha ido creciendo de forma alarmante. No es extraño ver letreros en las poblaciones donde se anuncia riesgo de alto contagio. Existen evidencias, no sólo de contagios de personas menores de 18 años, sino incluso muchos casos de muertes de menores de edad”, advierte la arquidiócesis de Xalapa en su comunicado. *** Agrega que la determinación de regresar a clases el 30 de agosto próximo “llueva, truene o relampaguee”, pone el énfasis sólo en el aspecto educativo y en la cuestión emocional de los niños, pero relativiza la parte de la salud, de la seguridad y del bienestar integral de los educandos y de sus familias. *** “Con el regreso a clases presenciales existe un alto riesgo de contagio entre los alumnos y con ello los docentes y los familiares. Por lo tanto consideramos que el regreso a clases presenciales no es de ningún modo seguro, no obstante el protocolo sanitario de las 10 acciones que el gobierno ha anunciado”, advierte. *** La Secretaría de Salud reportó este domingo 7 mil 658 nuevos casos de Covid-19 para registrar un acumulado de 3 millones 225 mil 073 infecciones en México. *** La cifra de muertes a causa del nuevo coronavirus en el país ascendió a 253 mil 155, luego de que la dependencia notificó 228 nuevos decesos respecto a los reportados ayer. *** Las 10 entidades federativas con el mayor número de casos activos son: Colima, Ciudad de México, Tabasco, Nayarit, San Luis Potosí, Nuevo León, Quintana Roo, Campeche, Baja California Sur y Querétaro. *** El gobierno federal reportó que el sábado 21 de agosto se aplicaron 279 mil 498 vacunas contra Covid-19, para llegar a un total de 80 millones 683 mil 665 dosis suministradas a nivel nacional desde que inició el plan de vacunación en el país en diciembre de 2020. *** De las 56 millones 277 mil 083 personas inoculadas, 30 millones 919 mil 930 cuentan con esquema completo con una o dos dosis dependiendo el tipo de vacuna aplicada y 25 millones 357 mil 153 personas están a la espera de la segunda dosis del biológico.
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