Por cierto, en un mensaje que le hicieran llegar a la periodista Claudia Guerrero, los trabajadores de la Oficina de Programa de Gobierno denunciaron lo siguiente: «En poco menos de tres años la dizque poderosa señora ha corrido y cambiado a su jefe de asesores, a su secretaria particular, a dos asesores, a una directora general, a cinco jefes de departamento, al encargado del Jurídico y ha tenido tres jefes de Unidad Administrativa y hasta tres titulares de la Unidad de Género, sin contar a todos los empleados corridos, incluyendo a una pobre compañera que tuvo por delito ser madre».
Ah, pero eso sí, la señora se nutre de frases célebres como esta: «No obligues a nadie a quedarse, mejor oblígalos a irse; quien insista en quedarse es quien vale la pena». Frase que ella atribuye a Roberto Matosas, pero que en realidad es una frase insustancial atribuida a Gabriel García Márquez. Hasta en eso se equivoca.