Irineo Domínguez Méndez / El escenario, pintado por los resultados electorales pasados, indica ya futuros prospectos para la candidatura a gobernador de Veracruz. El punto de partida no lo da el resultado local sino el federal. Varios candidatos apostaron al renacimiento político postulados por la oposición para colocarse, nuevamente, en el estrado público. La alianza PRIANPRD auguró mejores resultados; sin embargo, se equivocaron. Incluso, analistas que previeron una debacle del partido oficialista no atinan aún a comprender tal resultado (entre ellos este tecleador).
Los resultados de la elección de diputados federales arrojaron números rojos para la alianza “Va por Veracruz”. Hasta ahora se conocen dos resultados oficiales que favorecen a dicha alianza: el distrito IX con cabecera en Coatepec, ganado por Pepe Yunes y el distrito XII ganado, con cabecera en Boca del Río, con victoria de María Josefina Gamboa Torales. Extrañamente, esta alianza no obtuvo el triunfo en el distrito IV, con cabecera en la Ciudad de Veracruz. Así las cosas, un distrito fue ganado por un priísta y el otro por una panista. Tan Tan.
Pepe Yunes tuvo la suerte de enfrentarse a la candidata de Morena sin que este partido fuese en alianza. Como dice la canción: “¿de quién fue la culpa?, no quiero saberlo”; si fue de los aliados o fue de Morena; pero, la soberbia a veces tiene que pagar su precio; en este caso, la derrota electoral. Sumando los votos que obtuvo el PT y PVEM a los de Morena, en el distrito IX, se observa que el triunfo hubiese sido para esta alianza.
¡Golpe de suerte!, con resultado que “revive” y posiciona muy bien a Pepe. A simple vista, se observa que su partido y la alianza con el PAN-PRD ganaron 5 municipios de 16 que integran el distrito federal número IX. Por fortuna, los votos obtenidos en el resto de los municipios por los aliados fueron suficientes para obtener la victoria. Recordemos que el PAN-PRD no ganó ningún municipio en este distrito electoral federal. Como priísta, fue el candidato que más votos obtuvo; seguido por el de Orizaba.
El priísmo clásico y tradicional, en cuanto al reconocimiento de la militancia permanente y leal a su partido, le brindará todo su apoyo para que encabece la posible recuperación del tricolor. Por ahora no se vislumbra otro personaje que pueda opacarlo. La curul ganada, posiblemente, le coloque en alguna presidencia de las comisiones importantes de la Cámara de Diputados. Hasta podría encabezar la fracción parlamentaria de diputados plurinominales que correspondan a la Tercera Circunscripción.
Su imagen de político “caballeroso y conciliador” es otra fortaleza mostrada por Pepe. Sus compañeros de partido en el Estado, con posiciones beligerantes, no han podido ganarse imagen igual o parecida. El País y Veracruz necesita una oposición propositiva no recalcitrante; una oposición que se dirija a la población, no que hable de las propuestas de AMLO. Necesitamos una oposición que se manifieste en favor de todo lo que beneficie a México; entonces, las propuestas de la oposición y sus votos tienen que tener ese objetivo. Lo contario hará que el PRI desaparezca en todo el País. Parece que Pepe es la opción para tal propósito; al menos, en Veracruz.
Reitero, en mi opinión, no tiene adversario que le opaque en la búsqueda de otra posición en el 2024; la primera, de repetirse la alianza PRIANPRD, ser candidato a gobernador; la segunda, ser candidato a senador. ¿Los pluris locales? ¡Ni campaña hicieron! Ninguno de los tres, cosechadores del trabajo priísta, es bien visto y aceptado.
Tampoco, nadie duda, que el enemigo del PRI pudiera esconderse dentro de casa; incluso, se escuchan voces que así lo afirman. ¿Hará falta una limpia legal dentro de sus filas?
Otro sí digo. – En la próxima publicación hablaremos del resultado del PAN, en el mismo contexto. Por ahora, baste preguntar ¿El PAN aceptará que Pepe, en aras de la unidad panista, encabece la alianza?
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