Por andar de austeros en el mantenimiento de los aviones que viajan a los Estados Unidos, México se degradó a tener una aviación civil de tercera categoría. El presidente López Obrador en lugar de ordenar regirse bajo esas normas, en lugar d inyectar dinero para el mantenimiento de los aviones o la capacitación del personal, ha preferido quejarse: «No es tan grave, ellos tienen unas normas, las imponen en todo el mundo como suele pasar en otras cosas. A veces hay países que se sienten los gobiernos del mundo y se olvida que el mundo tiene alrededor de 200 países que son libres, independientes y soberanos».
Y dice que no es tan grave, cuando las líneas aéreas saben que es un duro golpe para su economía, pues sus viajes al extranjero se ven limitados.