En otras palabras, un incremento pírrico y vergonzoso que inmediatamente será pulverizado por la inflación en el país. Según el SNTE, los incrementos se verán reflejados de la siguiente manera: considerando un salario base mensual de ocho mil 687 pesos con 10 centavos, pasaría a nueve mil 25 pesos con 90 centavos, cuentas guajiras, ya que muchos maestros no cobran esa cantidad ni en sueños.
Todavía estos líderes de papel se llenan la boca al decir que consiguieron para despensa 40 pesos y para material didáctico otra cantidad similar. Todavía hasta el día de ayer, el SNTE no se había pronunciado, ahora vemos la razón, no son buenas noticias para el magisterio.