Bien hubiera podido el presidente informar sobre los avances en el tema de desaparecidos; algunos apoyos o programas para que las madres de estos desaparecidos no perdieran la esperanza de encontrar a sus hijos. Pero no, ¡al carajo con las madres de los desaparecidos!
Afuera se quedaron ellas, las que buscaban un diálogo con el presidente; las que pensaron que al menos hoy, 10 de mayo, el presidente las tomaría en cuenta. Pero no, ¡al carajo con las madres de los desaparecidos! Este es el presidente que no gusta del circo mediático, que busca cambia el estilo de la presidencia. De momento, el día de hoy extrañamos a don Raúl Velasco y a Denise de kalafe.