¿En serio esperaban que Porfirio Muñoz Ledo, un político de tantos años, de tanta experiencia se iba a someter a los caprichos del presidente y a sus imposiciones? ¿Esperaban que Muñoz Ledo se quedara callado ante las incongruencias de López Obrador? Pues entonces no lo conocen. El histórico político fue el primer diputado que interpeló a un presidente en un informe de gobierno. A partir de ese momento el ritual del informe cambio por completo, a tal grado que desde hace varios sexenios los presidentes de México no acuden a la Cámara de Diputados a rendir su informe; sólo entregan un documento y luego se reúnen con sus amigos.
Ahora, el diputado que le puso la banda presidencial a López Obrador, se levanta para exigir respeto a uno de los poderes del Estado. Muñoz Ledo, ante la imposición de otorgar más tiempo al presidente de la Suprema corte de Justicia de la Nación, todo por capricho e interés del presidente, ha decidido crear el Frente en Defensa de la Constitución.
Entrevistado por algunos medios Muñoz Ledo ha sido enfático: «El Ejecutivo denosta a los magistrados y a las instituciones que no les son sumisos, obedientes o abyectos (…) eso es indigno de un jefe de Estado”. Desde su punto de vista la Constitución Política “está siendo cínicamente violada por el Ejecutivo, y eso es lo que nos convoca». El político que empezó su trabajo desde los tiempos de Luis Echeverría declaró: «No recuerdo en el pasado del país una violación tan flagrante por parte del Ejecutivo de la Constitución del país. Es un hecho insólito, es un hecho atrabiliario y una mancha en la historia del país, por no llamarle lacra».
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