Primero su alfil bajacaliforniano la agarró contra alcaldes de oposición, el extremo fue haberle negado protección policiaca a una alcaldesa que en estos momentos descansa en paz. Después, su poca sesera avaló la alocada aventura de su servidor conocido como Bola 8, de poner tras las rejas al exsecretario de gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares. Esa jugada mal calculada ha colocado al cuestionable Rogelio Franco Castán como víctima de un gobierno represor.
Sin embargo, el resoplido rencoroso del segundo abordo ahora alcanza a un líder de un partido que está agarrando fuerza en Veracruz, nos referimos a la sospechosa detención del empresario porteño Ramón Ortiz Cisneros, promotor en el municipio de Coatzacoalcos y la región del partido Fuerza por México (FXM). Es bien sabido en el centro del país que, Morena, puede perder el municipio de Coatzacoalcos. Y es que, el de mero arriba les dio indicaciones de recuperarlo a como dé lugar.
Esto ha ocasionado que el gobierno de Cuitláhuac Jiménez, un imberbe ingeniero universitario que en años pasados se disfrazaba de merolico, se convierta en un personaje represor. Estas acciones, sólo abonan el terreno para que el partido que los postuló, se precipite a la derrota. Dese luego excepto en la capital del estado, donde Ricardo Ahued tendrá que dar la cara por los yerros de este gobierno fallido.
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