En un acto político en Tlaxcala, el diputado Gerardo Fernández Noroña pidió que le dieran elementos para “ponerle una chinga la próxima vez que abra la boca”, se refería a la diputada del PAN Adriana Dávila. Antes dijo ella: “Me comentan que hay una diputada, que fue senadora, y que está vinculada a este tema y que es más bocona que la chingada”. El INE lo conminó a que pidiera una disculpa pública ya que acudiera a unos cursos para quitarle lo machista y lo hocicón. Pero Noroña se ha resistido.
Ya acudió al INE a plantear su postura, pero como no llevó cubrebocas, pues se puso caprichoso diciendo que López-Gatell considera que el cubrebocas no es efectivo y que sólo genera una falsa seguridad; un López-Gatell a quien se le achacan ya más de 100 mil muertos. Ahora Noroña se burla del INE y dice: “Los del @INEMexico están jodidos. Querían lincharme mediáticamente acusado de violencia de género y se tuvieron que conformar con el ridículo que hicieron porque me niego a usar cubrebocas. Estiran el argumento diciendo que te mueres por no usar cubrebocas. #cretinos”.
En otro mensaje se burló: “Me muero de la risa de que querían presentarme como violento de género y ahora me presentan como el chacal sin cubrebocas. Pandilla de cretinos y miserables”. Pobre sujeto, da pena ver como el poder vuelve locos a algunos y a otros les hace brotar la imbecilidad.
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