El juez, ante todos, recalcó como habían estado los hechos. Resulta que la denunciante acompañó al acusado a tramitar un papeleo y posteriormente éste la invitó a un bar. Allí, el agresor la incitó a beber según dijo la víctima, por lo cual la joven perdió el conocimiento luego de una copa de vino. Después de esa copa, la joven no recuerda nada, sólo que al día siguiente amaneció desnuda en la habitación del agresor.
El juez señala que la joven omitió ciertos detalles. El supuesto violador declara que la joven se puso candente y le mostró su ropa interior roja tipo tanga y esto le dio a entender que la joven quería tener sexo. El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables de Perú rechazó los argumentos de la sentencia, que a su juicio contienen un razonamiento estereotipado y machista. Solicitaron un nuevo juicio.