Vergonzosa la actuación de Mercedes Santoyo, contralora y tapadera de Veracruz. La actuación de Mercedes Santoyo en la Contraloría nos recuerda a los fariseos de los tiempos de Jesús. Esos que eran como sepulcros blanqueados por fuera, pero que por dentro estaban llenos de inmundicia; esos que limpian la copa por fuera, pero que por dentro están rebosando de robo y desenfreno. Presume la contralora que ya han interpuesto 46 denuncias en los años de gobierno del 2005 al 2018 (limpian la copa por fuera), sin embargo, los funcionarios actuales están robando y saqueando en sus narices (por dentro están rebosando de robo y desenfreno) y ella se da cuenta y no hace nada.
“Tan solo de 2005 a 2018 un rezago de casi 8 mil millones de pesos el servicio en que nos hace la Secretaría de la Función Pública por irregularidades; nadie quiere arreglar el mugrero, siempre prefieren cerrar la alacena y no verla pero esa es una responsabilidad del servidor público” dice Mercedes Santoyo. Su actitud farisaica se advierte cuando las denuncias con pruebas de los saqueos den diversas dependencias han sido soslayadas por su oficina.
En Salud, SEV, Sedarpa, SIOP y otras dependencias, se han mostrado reportajes de esos saqueos y se ha documentado la manera como se han llevado a cabo esos saqueos. Pero la señora está muy ocupada investigando a las administraciones anteriores. No extraña, para eso la pusieron, para que sirviera de tapadera del gobierno de Cuitláhuac García.
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