Cuando el sobrino le contó sobre lo ocurrido, se dirigió a su hija para que le contara como había estado todo. La menor le contó que Radhamés Jones Díaz García desde hace varios días atrás pasaba en su carro y le hablaba, pero ella no le hacía caso. Un día el sujeto se bajó de auto con un arma obligándola a sostener relaciones sexuales en hotel con cabañas.
La madre acudió a denunciarlo, pero todo fue en vano pues las cosas se les voltearon debido a las influencias del funcionario. Los abogados salieron en defensa de Díaz García y argumentaron que el caso es resultado de una extorsión. Plantearon que el interés de la familia de la menor es sacarle dinero al empresario y que las alegaciones de agresión sexual no son ciertas. La madre relata que las autoridades examinan la denuncia que ella puso, la culparon de dedicarse a extorsionar hombres utilizando a su hija. La señora se encuentra desesperada sin saber qué hacer, lo único que ella quiere es que se haga justicia.