Y para que no quede duda del caso, Notiver muestra los documentos en donde consta que les urgía más contratar equipos de fumigación y recolección de basura, que los medicamentos para el cáncer. Son criminales, porque está omisión, esta negligencia pone en peligro la vida de los niños. Pero como ellos no los ven morir, pues como si no estuviera sucediendo. «El cáncer no espera», les recordó Jerezano Martínez Segovia, un niño de 6 años que padece de cáncer, que está combatiendo el linfoma de Hodgkin, una enfermedad que avanza en su cuerpo y que requiere se combata con los medicamentos que el gobierno criminal no compró.
¿A quien responsabilizar por este crimen? A Roberto Ramos Alor, a Cuitláhuac García y al propio López Obrador que sólo viene a decirnos que somos benditos por tener a su pupilo en el gobierno. Ah, y esos medios chayoteros que encumbren su crimen, también ellos son responsables.