Y es que, el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje recibió la notificación de la suspensión de amparo el 13 de agosto de este año, por lo que no podrá aplicarse el reglamento de elección, ya que «el procedimiento podrá continuar, pero no deberán ejecutarse sus consecuencias», según indica la notificación enviada por el juzgado de distrito al tribunal de conciliación, por lo que el SNTE prácticamente estaría en desacato a lo dispuesto en la reforma laboral que mandata la reforma estatutaria —no reglamentaria— para la elección democrática de sus dirigentes.
Pero eso no es todo, ante esta circunstancia, el dirigente nacional del SNTE Alfonso Cepeda está obligado a convocar a un congreso nacional extraordinario, fast track, para adecuar los estatutos del SNTE a la Reforma Laboral, como debió ser desde el principio, o explorar la vía judicial para ganar tiempo, sin embargo, antes del fin de este 2020, el TFCA (dependiente del poder Ejecutivo) que lo había dejado correr con su reglamento de elección, pasará a convertirse en el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral, dependiente del Poder Judicial, mismo poder que le otorgó el amparo a la escuela de Baja California Sur. Y por si esto fuera poco, se espera que se sumen otros estados con esta misma resolución. Así que quieran o no, la democracia sindical tendrá que aterrizar en el SNTE.