Sergio González Levet / Continuamos con la información confiable y profesional que nos aporta el doctor Iván Gutiérrez Hernández sobre el dióxido de cloro, que algunos están usando como tratamiento para la Covid-19.
—El rigor con el que se llegan a estudiar los medicamentos actualmente —precisa, informa, complementa nuestro especialista— ha hecho que se desmientan muchas cosas. Ya se desmintió en el transcurso de esta pandemia a la hidroxicloroquina, por ejemplo, y a otro medicamento que se llama tosidisumal. Miren, éstos sí son medicamentos y pensamos en un momento que podrían ser útiles. Cuando se hacen estudios con rigor, ya se vio que no funcionan. Además, se hacen estudios con placebos, en los que descartas que haya resultados por el pensamiento de la gente y no por la acción efectiva.
Aquí recuerdo que 80% de los contagiados van a superar la enfermedad, tomen lo que tomen, y la sugestión juega un papel muy alcahuete para el dióxido de cloro.
—Entonces —continúa el internista—, no hay ningún estudio que se haya realizado con dióxido de cloro en ese sentido, y tú no sabes si el efecto que está produciendo esta sustancia es un efecto químico benéfico o es un efecto de placebo.
Dejaré la palabra en adelante a nuestro amigo y especialista:
—Por otro lado, muchos de los hallazgos que se han dado en relación con ese producto son falsos. En algunos lados sí les están dando el dióxido, pero en otras partes les estaban dando una sustancia que no tenía nada que ver con él. Eran sustancias inertes y la gente reportaba que se mejoraba. Lo vendían como dióxido de cloro y a la hora que se analizó por parte de algunas dependencias y en algunos lados de Estados Unidos, en Centroamérica, en Sudamérica y en Europa resultaba que estaban vendiendo algo que ni siquiera contenía cloro, de modo que es impredecible lo que les van a dar.
—Lo que sí te puedo decir es que yo he visto pacientes intoxicados con dióxido de cloro, pacientes que han desarrollado insuficiente renal, que han tenido insuficiencia hepática y que ha sido una verdadera complicación sacarlos adelante por haber tomado elementos que los intoxicaron y que no los protegieron como les prometieron.
—Esos son los elementos que yo tengo. Yo no tengo elementos a favor. Y no puedo estar a favor de esa sustancia porque mi comportamiento tiene que ir de la mano de lo que es comprobable, no de lo que es el resultado del voz-a-voz.
—La historia de la humanidad nos ha dado ejemplos trágicos por haber seguido esa conducta muchas veces, y no pensamos repetir esta situación. No creo en el dióxido de cloro y no estoy a favor de él. No tengo elementos para estarlo y creo que si verdaderamente a la gente le están dando dióxido de cloro para ingerir, están poniéndose en riesgo.
—Lo que les venden diciendo que es dióxido de cloro y en realidad son sustancias inertes, pues no les va a pasar nada, y en situaciones como el coronavirus, mientras estén dentro del grupo que no les va a pasar nada, que van a ser asintomáticos o que les van a dar síntomas menores, pues igual se lo pueden atribuir al dióxido de cloro, aunque yo se lo atribuiría a la naturaleza y a la historia natural de la enfermedad.
—Espero que con este pequeño, breve, discreto y conciso comentario haya podido dar respuesta a tu inquietud.
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