Para colmo Artículo 19, Signa Lab y Aristegui Noticias pusieron al descubierto que desde las oficinas de Notimex se ocupaban en golpear a políticos y periodistas que le resultaban “incómodos” al gobierno. Al final todo se le juntó a Sanjuana Martínez, quien se echó encima a los trabajadores de Notimex, a varios periodistas a quienes acosó y a algunos funcionarios cercanos a López Obrador.
Hoy se habla de su posible salida, pero también se dice que la señora no va a salir de Notimex a menos que le den un cargo diplomático en París. Dice Dolia Estévez, una periodista que fue atacada por las huestes de Sanjuana: «Reprobable sería que, de confirmarse, le dieran un cargo diplomático como premio de consolación. Las embajadas/consulados no son guaridas de venidos a menos o indeseables. Pregunta fundamental en esta desagradable saga es: ¿qué va a pasar con @Notimex, la agencia que destruyó?»