Después de que se subiera a las redes sociales la receta de las enfrijoladas de Anahí, actriz y esposa de Manuel Velasco, las redes sociales no pararon en todo el día sus burlas para la mujer que pone dos tortillas de nopal frías en un plato, las embarra de frijoles bayos, les arroja queso y dice que son enfrijoladas; ¿por qué no se las comió? Ya hasta doña Margara Francisca salió a seguir la receta de Anahí, y por cierto se ven más sabrosas las de ella que las de la actriz. En Twitter las enfrijoladas de Anahí se convirtieron en tendencia.
Decenas de memes y burlas se han subido a esta plataforma poniendo en evidencia la tara mental de la actriz, que pensó que los mexicanos ignoraban como se hacen unas enfrijoladas y a ella se le ocurrió enseñarnos la receta como si la hubiera aprendido de un recetario antiguo; todavía anota, como si fuera su toque personal, «yo les pongo queso».
Pero si usted cree que Anahí anda escondida, llena de vergüenza, está equivocado. Ella misma se burla de sus propias pendejadas. Se ríe de los memes y hasta los comparte. Vaya usted a saber si lo que hizo fue a propósito, para que los mexicanos se acuerden de ella ahora que están confinados.
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