Por supuesto, la enfermera no está infectada, aparte esa no es manera de tratar a alguien que pelea por que la gente esté bien y libre del Covid-19. Según el relato de la enfermera, al llegar a su casa, en la comunidad de Nayarit, los vecinos de la zona la detuvieron con la intención de que no pasara. A pesar de haber elementos policiacos en el lugar, los policías no pudieron hacer nada, y sólo pidieron que tuvieran una sana distancia entre ella.
«Lo siento mijita, pero al pueblo no entras, o entras, pero ya no sales y si es al hospital de San Pancho Menos», sentenciaron los pobladores. La enfermera no tuvo de otra más que aceptar los términos de sus vecinos e irse del lugar.