Pues si bien es cierto que los menores de edad pueden tener el capricho de festejar su cumpleaños de manera temática, son los principios que los padres inculcan los que deben prevalecer. No es lo mismo celebrar un cumpleaños con el tema de “Toy Story” o de “La sirenita”, a festejar el cumpleaños haciendo una apología de un crimen.
El narcotráfico se ha convertido en una cultura y muchos jóvenes se han aficionado a la idea de llegar a ser sicarios o capos de la droga debido a que se dan cuenta que sus oportunidades de vida son limitadas.
En redes sociales son más crueles con los jóvenes. Los comentarios coinciden en que los que celebran su cumpleaños así es porque tienen suciedad en el cerebro. Pero hay quienes señalan a los verdaderos responsables: «Ahí los más estúpidos y culpables no aparecen en la foto. Y son los padres».