La maestra en su reclamó le dijo a Héctor Ayala Morales, quien sólo atinaba a aplaudir, que él tiene una secretaría muy amable, pero que él no es amable: «Usted se burló de mí. Hace más de un año fui (dijo señalando al funcionario) pero él me dijo que no podía quitarle el salario a un maestro para dárselo a otro. No sé si usted me lo quitó, pero usted no me atendió».
Sobre su plaza de maestra la mujer desesperada le preguntó dónde estaba su plaza, y por qué se la habían dado a un funcionario público. La exigencia de la maestra se ganó los aplausos de sus alumnos, quienes presenciaban toda la escena y por la cual el secretario de Educación de Michoacán también tuvo que aplaudir. La maestra dice que por la irregularidad en sus pagos está a punto de perder su casa. Ella pide que se haga justicia. Al final del evento el secretario de Educación dijo que el caso se revisaría, pues al parecer se había cometido un acto de injusticia.