No es necesario desojar la margarita, buscar el Santo Grial o afanarse por encontrar la piedra filosofal, sólo basta un poco de sentido común para comprender las razones que tiene el personaje que vino a cubrir las espaldas de Juan Díaz de la Torre en el SNTE. De entrada, este señor tiene que explicar qué hizo con los millones que el Gobierno Federal entregó para la promoción de la mal llamada Reforma Educativa. Se sabe que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación guardó hasta mayo pasado 435 millones de pesos que le sobraron de la partida de más de tres mil millones de pesos que recibió del Gobierno Federal para promover la Reforma Educativa impulsada por el Gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto.
La pregunta es ¿dónde está ese dinero señor Cepeda? Además, el actual comité tiene que entregar cuentas claras del uso que se ha dado a las cuotas de los maestros, cuentas que hasta el momento resultan confusas y opacas. También debe de entregar un informe detallado de los movimientos de plazas, cambios y permutas de los maestros en sus diferentes secciones.
Y tenga por seguro de que existe un fundado temor de que se le comprueben malos manejos con el dinero que ha recibido del Gobierno Federal y, sobre todo, existe la posibilidad de que le finquen responsabilidades, ya que él mismo Cepeda Salas fue durante mucho tiempo, el encargado de las finanzas del sindicato. Ahora entiende usted porque el señor no lleva prisa para sacar lo que por ley se le exige.
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