Qué se puede esperar de un funcionario público que piensa que usar a diario una bata, eso lo convierte en médico. Si hay una dependencia que no debe escatimar en el bienestar de los ciudadanos, esa es la de Salud. Ahí no se valen los ahorros, en la Secretaría de Salud, más que en cualquier otra dependencia, el presupuesto se debería usar de manera óptima y eficiente.
No se trata de comprar medicinas más baratas, aunque no tengan la posología adecuada para curar a un enfermo o para mitigar el dolor a una persona. El dolor y la salud de los veracruzanos no requiere de ahorros sino de utilizar el presupuesto de la manera más adecuada. Pero eso no lo entiende un sujeto que se vale de supercherías para conseguir victorias que al final terminan en derrotas.