Freddy McConnell nació mujer, pero desde pequeño se sentía más niño que niña. A los 25 años empezó la transición de género y se operó para quitarse tejido mamario y a tomar testosterona. Sin embargo, a los 30 dejó de tomar hormonas para que su cuerpo volviese a funcionar como el de una mujer y poder concebir un hijo. Al dejar de tomar testosterona, McConnell volvió a menstruar. La falta de esta hormona hizo que entre otras cosas su cuerpo volviera hacer fértil como mujer.
Freddy comenta en una entrevista que tener un hijo no fue una decisión fácil, pero tener su propio hijo era lo más pragmático, la opción más simple, dijo el periodista que trabaja para un medio informativo británico. El primer intento de embarazo que decidió hacer McDonnell fracasó, pero el segundo dio buenos resultados.
Vivir en un pueblo pequeño rodeado de amigos y familiares que lo apoyan ha hecho más cómoda su situación. Después de que los medios ingleses conocieran la noticia de Freddy McConnell, le propusieron hacer un documental, en este se propondrá normalizar la vida de los transexuales Hoy en día McConnell vive feliz en un municipio costero de Inglaterra con su bebé recién nacido al que le puso el nombre de Jack.
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