La Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas no se podrá quitar nunca el estigma de ser una mera ocurrencia de Gina Domínguez y de Javier Duarte. La CEAPP tenía como propósito, desde su creación, ser una mascarada para hacer ver al gobernador de Veracruz como un baluarte de la libertad de expresión. La CEAPP no ha podido evitar las agresiones en contra de los periodistas, porque la impunidad en cada asesinato de periodistas es lo que ha imperado.
Pero hay que ser honestos, tampoco la CEAPP tiene los elementos jurídicos efectivos para obligar a una instancia gubernamental a brindar las garantías necesarias para que los periodistas ejerzan su trabajo en un ambiente de seguridad. Ahora, con la muerte de Celestino Ruiz Sánchez, al parecer la Comisión tendrá que explicar para qué carajos sirve.
Desde el Senado de la República se aprobó un punto de acuerdo que exhorta al Congreso del Estado a llamar a comparecer a Ana Laura Pérez Mendoza, titular de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas del Estado de Veracruz (CEAPP).
La titular tendrá que explicar cuáles han sido las acciones que han llevado a cabo a favor de los periodistas. En una de esas informa cuantas coronas de flores ha mandado a los funerales de los compañeros periodistas, porque finalmente para eso es para lo único que sirven.
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