Gabriel Siria Levario más famoso por su nombre artístico, Javier Solís, conocido como el Rey del Bolero Ranchero, murió un día 19 de abril de 1966 a la edad de 34 años. El parte médico señala que el cantante murió debido a una infección en las vías urinarias. Javier Solís, una de las voces más privilegiadas de la música en el siglo XX, no quería ser cantante, sino boxeador. Pero fue la necesidad y el hambre lo que lo llevaron a Garibaldi, donde se puso a imitar a Pedro Infante y Jorge Negrete. Ahí fue descubierto y gracias a su voz, su carrera como cantante empezó a tener auge.
Un detalle curioso es que el nombre artístico original de Javier Solís era Javier Luquín, pero un amigo acertó al cambiarle el nombre por Javier Solís, porque este cantaba como “solista”. Son varios los temas que el Rey del Bolero Ranchero hiciera famosos, Sombras, Payaso, Mi viejo San Juan. Como actor participó en varias películas como Tres balas perdidas, una comedia ranchera que significó el debut del cantante en el cine. Asimismo, destacan films como Los cinco Halcones, Campeón de barrio o Los barbaros del norte, una comedia rural donde compartió escenario con el pintoresco Clavillazo. Entre otras también se encuentra México de mi corazón, donde actuó junto a Lola Beltrán, Luis Aguilar y una entonces joven Lucha Villa.
Un dato interesante es la admiración que el famoso cantante americano Frank Sinatra sentía por él. A este legendario interprete le gustaba escuchar el repertorio de este singular cantante mexicano. El sentimiento siempre fue reciproco por parte de Javier Solís, quien tuvo la oportunidad de conocer a Sinatra un año antes de su fallecimiento. Este encuentro se dio tras un viaje a Nueva York, donde Solís grabó un disco que llevaba el nombre Javier Solís en Nueva York. Sin duda, un hombre que marco época en la cultura mexicana y que será recordado por mucho tiempo por su inigualable estilo y gran personalidad.
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