En Veracruz, ya se rebasó la cifra de 40 agrupaciones sindicales, esa situación de atomización, en lugar de beneficiar a los maestros, provoca que las fuerzas disidentes se encuentren divididas. Desde luego que reconocemos que todo trabajador tiene el derecho constitucional de formar parte del sindicato que quiera, siempre y cuando cumpla con la Ley del Trabajo.
No obstante, resulta muy sospechoso que al frente de este nuevo sindicato esté Iván Martínez un cercanísimo amigo del actual gobernador, que según sus propias palabras, se lleva de piquete de ombligo con el Ejecutivo local. Este personaje es subsecretario de Turismo. No está frente a grupo, y ahora anda diciendo que cuenta con todo el apoyo del rey de la salsa jarocha. Y es que no es poca cosa conseguir un registro federal. A ver si no se pone celoso por ahí otro funcionario que también anda viendo lo de su Liga, ¡perdón!, lo de otro sindicato.