El único mérito de este sujeto es que apostó todas sus canicas al barco de Morena, está en el puesto por obra y gracia de la venia del gobernador. Y es que, a este sujeto, en el Día Internacional de la Mujer, se le hace fácil discriminar y tratar con la punta del pie a una reportera que sólo cumplía con su trabajo.
Desde aquí, de este medio, hacemos patente nuestra solidaridad con Valeria Marcial y reprobamos tajantemente el comportamiento tonto y soberbio de un sujeto que, tarde o temprano, tendrá que aprender que a la mujer no se le toca ni con el pétalo de una flor.