Luego de lamentar la desgracia que se vive en el municipio de Tlahuelilpan, Hidalgo, Andrés Manuel López Obrador manifestó que espera que esta desgracia sirva como un disuasorio. En este sentido pidió que las personas entiendan que las consecuencias por robar gasolina de los ductos de Pemex pueden ser terribles, tales como las que sucedieron la noche de este viernes. Así mismo dijo que pese a lo sucedido su gobierno no se detendrá en la lucha en contra del robo de combustible.
“Aunque duela mucho tenemos que seguir con el plan de acabar con el robo y estas prácticas, no vamos a detenernos, vamos a erradicar esto que no solo daña materialmente, no se trata solo de lo que pierde la nación por este comercio ilegal, sino el riesgo, el peligro y la pérdida de vidas humanas”. Al mismo tiempo pidió a los habitantes a que ya no se sigan arriesgando, a ya no seguir participando en el delito de robo de combustible.
Sin duda alguna esta es una desgracia en todo el sentido de la palabra. Las razones por las que las personas acudieron para llevarse un poco del combustible que se estaba derramando del ducto de Pemex quedan un poco de lado de lado, y no hay más que esperar que las personas dimensionen los riesgos a los que se exponen al estar en los sitios de derrames. De igual manera esperamos que las fuerzas del orden entiendan que si actúan a tiempo, pueden evitar que sucedan este tipo de desgracias.
Comentarios