Contrario a lo que sucedió hace algunos meses, en esta ocasión las autoridades mexicanas no impidieron el ingreso de los centroamericanos que forman parte de la nueva caravana migrante. En Chiapas inició el arribo de los primeros grupos de personas que han salido de sus países en busca de mejores oportunidades de vida y han sido atendidos por el Instituto Nacional de Migración. Lo anterior ha sido con el fin de garantizar el orden y el control, así como para poner nombre y apellido a todos aquellos que estarán ingresando a nuestro país.
Hace unas semanas informamos que en los países del sur se estaba organizando el que será el mayor éxodo de centroamericanos, algunos medios reportan que serán miles las personas que migrarán hacia el norte. Cabe mencionar que en esta ocasión el destino final no será Estados Unidos sino México. Será en nuestro territorio donde permanecerán por algún tiempo, sobre todo en los estados del sur, allí buscarán empleo y una vez que su situación se defina, algunos partirán con rumbo hacia Tijuana, otros optarán por quedarse o regresarse a sus países de origen.
Como lo mencionamos, el gobierno mexicano ha instalado puestos de control en la frontera sur, y se ha dicho listo para recibir a quienes lleguen. En este sentido, se ha dicho que los migrantes serán atendidos y que, mientras estén en suelo mexicano, se les garantizarán sus derechos humanos. Esperemos que en las próximas semanas las autoridades no sean rebasadas ante la llegada de los migrantes, pues hay que recordar que se estima la llegada de miles.
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