La postura de Gael García Bernal y de Diego Luna, quienes han manifestado su desagrado por los recortes presupuestales en el rubro de Cultura, se llama congruencia. Ellos no hicieron campaña a favor de AMLO, ellos se manifestaron en contra de las políticas y la corrupción del gobierno de Enrique Peña Nieto; ellos apoyaron los diversos movimientos a favor de los derechos humanos y en contra de las desapariciones masivas.
Eso se leyó como apoyo a López Obrador, pero incluso si abiertamente hubieran apoyado a López Obrador, eso no los obliga a aplaudir como “chairos” todo lo que AMLO esté llevando a cabo. Esa misma postura la están tomando miles de ciudadanos que querían a Andrés Manuel López Obrador como presidente, pero no desean que ese presidente sea omnipotente.
Gael García Bernal lamenta que a Cinematografía se le baje un 7% al presupuesto y Diego Luna lamenta el daño ambiental que causará la instalación del Tren Maya. Están en su derecho de protestar, como cualquier mexicano que no está de acuerdo con el presidente, sea que haya votado a favor de él o en contra. Pero Congruencia es una palabra que no está en el diccionario Chairo-Español/Español-Chairo.
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