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Tres pueblos mágicos

Jorge Diaz Bartolomé / Recientemente el grupo de Xalapa Antiguo recorrió los estados de Tlaxcala y Puebla para conocer tres localidades que han merecido el título de Pueblo Mágico.

En el bien conservado centro histórico de Tlaxco, Tlaxcala destaca la Parroquia de San Agustín de Hipona, la cual fue construida en el siglo XVII; en su edificación participó don Vicenzo Barroso de la Escaloya, autor del diseño de la Catedral de Morelia. La fachada de cantera rosa se distingue por sus nichos vacíos y destaca la imagen de San Agustín sobre un águila bicéfala; el retablo principal se terminó en 1760. Su único cuerpo de perspectiva agigantada lleva ocho imágenes entre las que sobresale una en relieve de San Agustín. En las pechinas de la cúpula octagonal se representan los cuatro doctores de la iglesia y en el coro se conserva un órgano del siglo XVIII. La sacristía fue la iglesia primitiva, pues tiene altar y campanil exterior.

La fachada exterior del Palacio Municipal es otra joya de Tlaxco, fue inaugurado en 1894 por don Porfirio Díaz.

La historia de doña Victoria Dorantes fue lo que causó mayor asombro entre los viajeros xalapeños, principalmente por lo desconocido de su vida. Victoria sólo tenía 18 años cuando el pintor Jorge González Camarena quedó impresionado por su belleza, el artista le pidió que posara para él, pero ella le respondió que estaba casada por lo que desistió de pintarla hasta que un día se enteró que había enviudado y fue cuando posó para su pincel a los 19 años de edad. Victoria se trasladó a la Ciudad de México donde trabajó como mesera y formó parte de la bohemia mexicana. Ahí conoció al doctor Atl, a Pablo Neruda y a Diego Rivera; este último le cambió el apellido por el de “Dornelas” cuando ella le mostró unos dibujos y riendo Rivera dijo, “Miren a la Doré”, a la “Dornelas”, en alusión a Gustav Doré. González Camarena la inmortalizó en un óleo sobre tela encarnando a “La Patria” para la portada de los libros de texto gratuito, pasando a la historia por ser la imagen más reproducida en más de 600 millones de libros. Como un detalle histórico es importante señalar que los datos biográficos de Victoria fueron pasados por alto por los historiadores y redactores de la SEP, así como también por el gobierno de Adolfo López Mateos, encargado de poner en circulación esa enorme cantidad de ejemplares y nunca se dio el crédito al pintor ni a la modelo. La historia de la bella Victoria, nacida en Tlaxco, Tlaxcala es sin duda conmovedora, ya que murió en el anonimato.

Zacatlán de las manzanas es un bello pueblo que ha sabido encaminar sus atractivos hacia un buen turismo, la arquitectura de su centro histórico ha sido conservado, destacando el conjunto conventual franciscano, concluido por la orden en 1567, según un medallón de piedra colocado en la torre sur. Este convento fue tan importante que los frailes Juan de Torquemada y Toribio de Benavente lo visitaron en varias ocasiones. El 12 de mayo de 1845 se inaugura la Escuela Lancasteriana de la Divina Providencia en el claustro del convento San Francisco, después del incendio que sufrió en 1816.

Otra de las joyas con las que cuenta Zacatlán, es el Palacio Municipal, construido entre 1876 y 1896, con una extraordinaria fachada de estilo neoclásico, proyecto del arquitecto Francés La Salle.

La historia de la fábrica de relojes Centenario inicia en 1918 cuando don Alberto Olvera Hernández fabrica su primer Reloj Monumental que fue instalado en la Parroquia de Santiago Apóstol, en Chignahuapan, Puebla. Después de la venta de dicho reloj, adquirió las herramientas adecuadas para continuar construyendo relojes, aunque no dejaba de pensar en cómo mejorarlos y perfeccionar su manufactura. Don Alberto tuvo la suerte de haber encontrado un tratado completo de relojería monumental, solo que estaba impreso en francés, así que aprendió la lengua para poder traducirlo.

Logró vender un segundo reloj en la Villa de Libres, Puebla para la Parroquia de San Juan de los Llanos, el cual tuvo un costo de $3.000 pesos en oro; al terminar de instalar el reloj, el comprador Pbro. Isaac González le preguntó a don Alberto que cuál era su marca, a lo que le contestó que aún no contaba con ella, pero que había pensado que probablemente pudiera ser “Triunfo”, fue en ese momento que el padre le comentó que ese día 27 de septiembre se conmemoraba el primer centenario de la Independencia, que podría ser una buena opción para el nombre de la marca. Fue así que nació “Centenario”, símbolo de una fábrica que se distingue por su talento y presencia en muchas iglesias y palacios a lo largo y ancho del territorio nacional.

El tercer pueblo visitado fue Chignahuapan. Su importancia radica principalmente en la fabricación de esferas de vidrio soplado decoradas a mano con diversas técnicas, dada su calidad, han logrado su exportación a Estados Unidos, Centroamérica y Sudamérica. Cientos de artesanos de la región se dedican a esta actividad, por lo que Chignahuapan es considerado el mayor productor nacional de esfera navideña. Actualmente, se tienen registrados 200 talleres de esferas en el municipio, en donde todo el año elaboran este producto navideño.

En el tema histórico destaca su Parroquia de Santiago Apóstol que fue originalmente un templo franciscano, tiene una interesante fachada que refleja el arte tequitqui, caracterizado por formas vegetales; un sincretismo que muestra el proceso de evangelización en la Nueva España. En la Plaza de Armas se ubica un kiosco de madera de estilo mudéjar construido en 1871.

Un recorrido histórico que tuvo la finalidad de conocer la riqueza cultural de tres pueblos mágicos, como muchos otros con que cuenta nuestro México.

Agradecimientos: Al director de Turismo y Desarrollo Económico de Tlaxco Lic. Gaspar Serrano Rivera, al ex presidente municipal de Tlaxco don Silvestre Velázquez Guevara, a don Salvador Guevara, al Presidente Municipal de Zacatlán Profr. Luis Márquez Lecona. Al Cronista de Zacatlán Profr. Felipe Guzmán Hernández, a la maestra Mary Carmen Guevara por las atenciones prestadas en Chignahuapan.

Recuerda que México es tu museo.

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